Oviedo, la capital del Principado de Asturias, es una ciudad llena de encanto, historia y belleza natural. Con sus calles empedradas, su impresionante patrimonio cultural y una gastronomía que deleita a cualquier visitante, es un lugar ideal para una escapada de fin de semana.
Día 1: Explorando el casco histórico y los alrededores
Mañana: Paseo por el casco antiguo
Comienza tu fin de semana con un paseo relajante por el casco antiguo de Oviedo. Este es el corazón histórico de la ciudad, y uno de los lugares más encantadores para perderse entre sus calles y plazas.
Plaza de la Catedral y la Catedral de San Salvador: Este es un punto de partida perfecto. La Catedral de San Salvador es una obra maestra del gótico asturiano y es uno de los monumentos más emblemáticos de Oviedo. Su fachada imponente y su interior cargado de historia merecen una visita, especialmente la Cámara Santa, donde se guardan reliquias cristianas de gran importancia. El claustro de la catedral también es una maravilla que invita a la reflexión y el descanso.
La Plaza del Fontán: A pocos minutos caminando desde la catedral, encontrarás la Plaza del Fontán, una de las plazas más pintorescas de la ciudad. Rodeada de coloridos edificios tradicionales y con un ambiente animado, es un buen lugar para disfrutar de un café o una sidra asturiana en alguna de sus terrazas.
El Mercado El Fontán: Si es sábado por la mañana, no te puedes perder el mercado de El Fontán. Aquí podrás disfrutar del bullicio local mientras descubres productos frescos, embutidos, quesos asturianos y más. Es el lugar perfecto para ver cómo se desarrolla la vida diaria en Oviedo y, tal vez, comprar algunos productos locales.
Mediodía: Una comida asturiana típica
Para el almuerzo, no hay nada mejor que degustar la comida tradicional asturiana. En el casco histórico encontrarás numerosos restaurantes que ofrecen platos como la fabada, un guiso de fabes (judías blancas) con embutidos, el cachopo (una especie de filete empanado relleno de jamón y queso), o pescados frescos del Cantábrico. Para maridar tu comida, no puedes olvidar acompañarla con una botella de sidra natural asturiana. Algunos restaurantes recomendados para disfrutar de la gastronomía local son Casa Fermín, La Corte de Pelayo o El Raitán.
Tarde: Museos y arte en Oviedo
Después de una comida deliciosa, puedes pasar la tarde visitando algunos de los museos de la ciudad.
Museo de Bellas Artes de Asturias: Este museo es uno de los principales referentes culturales de la ciudad y una parada obligatoria para los amantes del arte. En su interior encontrarás una colección que abarca desde el arte medieval hasta el arte contemporáneo, con obras de artistas españoles e internacionales, como Goya, Picasso y Sorolla.
Museo Arqueológico de Asturias: Ubicado en el antiguo monasterio de San Vicente, este museo alberga una rica colección de objetos que narran la historia de Asturias desde la prehistoria hasta la Edad Media. Es un lugar ideal para conocer más sobre la rica herencia cultural y arqueológica de la región.
Atardecer: Parque Campo de San Francisco
Para terminar el día, nada mejor que un paseo por el Parque Campo de San Francisco, el pulmón verde de Oviedo. Este parque es un oasis en medio de la ciudad, con senderos sombreados, estanques, y una gran variedad de flora y fauna. Además, es uno de los lugares preferidos por los ovetenses para relajarse al final del día.
Si te apetece una merienda, en los alrededores del parque hay varias cafeterías donde puedes disfrutar de un dulce típico asturiano como el "carbayón", un pastel de hojaldre, almendra y azúcar, o unas "casadielles", un delicioso postre de nuez.
Noche: Cena y sidrería
Para la cena, puedes dirigirte a Gascona, conocida como la "Calle de la Sidra". Esta es una calle llena de sidrerías tradicionales donde puedes disfrutar de una cena informal a base de tapas asturianas y, por supuesto, más sidra. No olvides pedir al camarero que te sirva la sidra "escanciada", una técnica especial que se utiliza para oxigenar la bebida y mejorar su sabor.
Entre las sidrerías más recomendadas de Gascona están Sidrería Tierra Astur y Sidrería La Pumarada, donde podrás saborear una auténtica experiencia gastronómica asturiana.
Día 2: Naturaleza y rutas históricas
Mañana: Subida al Monte Naranco y sus monumentos prerrománicos
El segundo día de tu fin de semana en Oviedo te llevará a las afueras de la ciudad, al Monte Naranco, una montaña cercana desde la cual puedes disfrutar de unas vistas impresionantes de Oviedo y sus alrededores.
Santa María del Naranco: Este edificio, que en su origen fue un palacio, es uno de los mejores ejemplos del arte prerrománico asturiano. Su arquitectura única y su situación privilegiada sobre la ladera del monte lo convierten en un lugar espectacular. Santa María del Naranco fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, lo que subraya su importancia histórica y artística.
San Miguel de Lillo: A unos metros de Santa María del Naranco se encuentra San Miguel de Lillo, otra joya del arte prerrománico asturiano. Aunque una parte de la iglesia original se ha perdido con el tiempo, el edificio que queda sigue siendo fascinante por sus decoraciones y su historia.
Después de la visita, si el clima lo permite, puedes aprovechar para realizar una caminata por el monte y disfrutar de las vistas panorámicas. Hay rutas bien señalizadas y adaptadas para todos los niveles.
Mediodía: Comer en los alrededores del Naranco
Tras la subida al Monte Naranco, te habrás ganado una buena comida. En los alrededores hay varios restaurantes que ofrecen platos tradicionales asturianos con un toque casero, ideales para reponer fuerzas.
Tarde: Ruta literaria tras los pasos de Clarín
De vuelta a la ciudad, puedes dedicar la tarde a descubrir la Oviedo literaria, recorriendo los lugares que inspiraron a Leopoldo Alas "Clarín" para escribir su famosa novela "La Regenta". Oviedo es una de las protagonistas de esta obra, y pasear por la ciudad con la novela en mente te permitirá ver Oviedo desde una nueva perspectiva.
La estatua de La Regenta: Ubicada frente a la catedral, esta estatua es un homenaje a la obra de Clarín. Representa a Ana Ozores, la protagonista de la novela, y es un punto de partida perfecto para esta ruta literaria.
Plaza de Porlier y Plaza de la Constitución: En esta zona de la ciudad, Clarín ambientó algunas de las escenas más importantes de su novela. Pasear por estas plazas te permitirá sentirte parte de la historia literaria de la ciudad.
Atardecer: Relax en una terraza
Tras una jornada cargada de historia y cultura, puedes pasar la tarde relajándote en una de las terrazas de la ciudad, disfrutando de un café, un helado o, si prefieres algo más típico, una botella de sidra. El ambiente tranquilo de Oviedo en las últimas horas de la tarde es perfecto para descansar y asimilar todo lo vivido.
Noche: Teatro o cine
Para culminar tu fin de semana en Oviedo, ¿por qué no disfrutar de una noche cultural? La ciudad ofrece una variada programación de teatro y cine, especialmente en el Teatro Campoamor, que es el teatro más emblemático de Oviedo y sede de los Premios Princesa de Asturias. Consulta la cartelera para ver si hay alguna obra interesante o una película que te atraiga.
Oviedo es una ciudad que sorprende a quienes la visitan por primera vez. Su mezcla de historia, cultura y naturaleza la convierte en un destino perfecto para un fin de semana completo y enriquecedor.